A partir del 1 de enero de 2025, el paisaje automovilístico de Madrid cambiará de manera irreversible. Con la entrada en vigor total de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), más de un millón de vehículos sin etiqueta ambiental tendrán prohibido circular por toda la capital. Esta normativa no distingue entre residentes y no residentes: todos los coches y motos sin distintivo de la DGT quedarán fuera del municipio.
Esta medida afecta principalmente a los vehículos gasolina matriculados antes de 2001 y los diésel anteriores a 2006. Según datos oficiales, cerca de 15.000 vehículos sin etiqueta circulan a diario por Madrid, cifra que representa una fracción del total de 838.000 coches y 112.000 motos que deberán abandonar la ciudad.
3Multas y consecuencias de incumplir
La normativa no solo implica la prohibición de circulación, sino también sanciones económicas. Aquellos que circulen con vehículos sin etiqueta por las zonas restringidas de Madrid se enfrentarán a multas de 200 euros. Esto refuerza la urgencia de adaptarse a las nuevas reglas antes de 2025.
Además, el cumplimiento será riguroso. Madrid ya lidera las ciudades españolas en la implementación de estas medidas, y otros municipios están adoptando políticas similares. Esto convierte a la capital en un referente en la lucha contra la contaminación, pero también en un ejemplo de los desafíos que enfrentan los propietarios de vehículos antiguos.