comscore
sábado, 23 noviembre 2024

Mitsubishi Outlander PHEV, enchufable y eficiente

Ya hemos tenido ocasión de ponernos al volante del nuevo Mitsubishi Outlander PHEV, un crossover que se caracteriza por ofrecer una mecánica híbrida enchufable, compuesta en esta ocasión por un motor térmico de gasolina y dos motores eléctricos, cuyo funcionamiento puedes ver en el siguiente vídeo. Aparentemente, los cambios estéticos son mínimos respecto al Otulander convencional equipado exclusivamente con un motor de combustión (actualmente sólo se ofrece con el motor 220 DI-D con 150 CV).

Mide 4,65 metros de largo, 1,80 metros de ancho y 1,68 metros de alto, y la adopción de las baterías no resta excesiva amplitud a su habitáculo, pues su maletero arranca en los 463 litros, lo que según Mitsubishi son sólo 14 litros menos que un Outlander convencional. Eso sí, su peso se incrementa en unos 300 kilos, hasta un total de 1.885 kilos si tenemos en cuenta el conductor.

Regeneración variable desde las levas

En su habitáculo quizá hay algún cambio más, pues es nueva la palanca para el selector de la marcha, los relojes, las levas, que curiosamente en este Outlander PHEV sirven para ajustar la capacidad de regeneración al levantar el pie del acelerador (va del 0 a 5), o la pantalla táctil central en la que podemos visualizar el funcionamiento del sistema de propulsión, la carga de la batería, el gasto del climatizador o los equipos auxiliares…

Eso sí, las pantallas que muestran nuestro consumo a lo largo de un recorrido, bien de días o semanas, es bastante confuso.La amplitud interior es notable y Mitsubishi lo ofrece con dos niveles de equipamiento: Motion y Kaiteki. El primero ya cuenta con todo lo necesario, mientras que el segundo suma elementos como la tapicería de cuero, el techo solar, además de numerosos sistemas de seguridad activa (avisador de cambio involuntario de carril, control de velocidad con radar, sensores de ángulo muerto…).

Un motor de gasolina y dos eléctricos

Pero la principal novedad de este Mitsubishi Outlander PHEV reside en su sistema de propulsión. En el eje delantero cuenta con un motor de combustión, en concreto un motor 2.0 de gasolina atmosférico que ofrece una potencia de 121 CV. Dicho propulsor está conectado a las ruedas delanteras y sirve para impulsar al vehículo y como generador de corriente para alimentar sus baterías de ión litio con una capacidad de 12 kWh. Dichas baterías van situadas en los bajos del vehículo para bajar el centro de gravedad y se pueden recargar en un enchufe doméstico en unas cuatro horas. También se puede recargar en una toma trifásica, en la que en 30 minutos recargamos el 80%.

Eso sí, la capacidad de las mismas es la que es y sólo nos da para recorrer como máximo 52 kilómetros, impuestados eso sí por sus dos motores eléctricos, uno en cada eje. Ambos motores eléctricos tienen una potencia de 82 CV, mientras que el par motor del delantero es menor que el del trasero (137 Nm por 195 Nm). 

En eléctrico hasta 120 km/h

Esta disposición convierte al Outlander PHEV en un vehículo con tracción a las cuatro ruedas sin necesidad de tener una conexión entre el motor térmico y las ruedas traseras, y está basada en el sistema S-AWC, que utiliza el Mitsubishi Lancer Evolution. En modo totalmente eléctrico, podemos mantener una velocidad de crucero de 120 km/h y cuando las baterías se agotan o superamos dicha velocidad, pasa a funcionar como un vehículo híbrido, pues el motor de combustión se conecta para generar energía con las que alimentar la batería y esta a su vez a los motores eléctricos, pero no impulsa al vehículo.

Sí lo hace si demandamos al máximo la energía de este Outlander PHEV, capaz de proporcionar un total de 203 CV, momento en el que funcionan a la vez sus tres motores. Eso sí, la velocidad máxima está limitada a 170 km/h, mientras que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 11,0 segundos.

Recarga con el motor de gasolina

Este Outlander PHEV también tiene la particularidad que cuando el motor de combustión entra en funcionamiento, el par motor sobrante lo utiliza para cargar las baterías, pero también podemos activar el modo «Charge» desde un botón situado junto al cambio (por cierto no hay cambio, sino un reductor igual que en los vehículos eléctricos puros). Al activar dicho botón, el motor térmico arranca y carga las baterías, incluso con el vehículo estacionado, de manera que en unos 45 minutos tenemos el 80 por ciento de la carga (como en una recarga rápida). Mitsubishi dice que esta operación requiere unos 3 litros de combustible, los cuales nos darán para recorrer en eléctrico puro unos 42 kilómetros, lo que equivale a un consumo de unos 7,2 l/100 km. Sin embargo este Mitsubishi Outlander anuncia un consumo medio de sólo 1,9 l/100 km, con unas emisiones de 44 g/km de CO2 (5,8 l/100 km homologa uno con motor 220 Di-D de 150 CV, tracción total y cambio automático).

Durante la toma de contacto, y conduciendo de manera muy sosegada intentando gastar lo mínimo, en un recorrido de aproximadamente 120 kilómetros, medimos un gasto medio de sólo 2,4 l/100 km, lo que es una cifra sensacional (más de 52 kilómetros los hicimos en modo totalmente eléctrico con la carga de su batería, mientras que el resto fue en híbrido).

Mitsubishi ofrece un descuento inicial de 3.000 euros en la compra de estos Outlander PHEV, que se incrementa en otros 4.500 euros si el gobierno finalmente aprueba el nuevo plan Movele. Así, el descuento total llegaría a los 7.500 euros, cifra que deja en una excelente posición el precio final de este Otulander cuyos precios sin ningún tipo de descuento son:

– Mitsubishi Outlander PHEV Motion: 42.000 euros (quedaría en 34.500 euros)

– Mitsubishi Outlander PHEV Kaiteki: 47.000 euros (quedaría en 39.500 euros)