El éxito de los SUV y la electrificación de la automoción son dos vertientes opuestas que tarde o temprano van a acabar colisionando. El mercado automovilístico vive en una paradoja constante marcada por las legislaciones cada vez más severas con los vehículos contaminantes.
Todas las leyes están encaminadas a la electrificación de la automoción y al uso de vehículos cada vez más eficientes y con menos emisiones. Este camino emprendido, choca con la realidad en muchos aspectos, y uno de ellos es la tendencia de diseño que reina en la actualidad, la de los SUV. Estos 4×4 urbanos están destinados a desentonar en el escenario de movilidad ecologista con el que sueñan tantas organizaciones.
3La influencia de los SUV en el cambio climático
El otro motivo por el que los SUV no encajan con el futuro de movilidad urbana, es precisamente por su influencia en el cambio climático. Desde hace tiempo se elevan voces de protesta contra este diseño, que muchas asociaciones ecologistas, consideran contaminante.
Un ejemplo de estos grupos contrarios al diseño SUV se pronunció en la celebración del Frankfurt Motor Show, una de las ferias más importantes de Europa. En las puertas se congregaron miles de manifestantes al grito de «Asesinos del clima«. Además esta feria coincidió en el tiempo con la muerte de cuatro peatones en un solo accidente provocado por un SUV.