Cuando Fernando Alonso ganó su primer Campeonato Mundial de Fórmula 1 en 2005, difícilmente imaginó que años después crearía un museo para sus vehículos y recuerdos más importantes. Todo comenzó con el mítico R25, el monoplaza con el que ganó el título en 2005 y que Renault le regaló como un reconocimiento a su hazaña.
Pronto, ese coche se convirtió en un imán para los fanáticos que viajaban hasta la casa del piloto en Asturias solo para verlo de cerca y tomarse fotos junto a él. “La razón para construir el museo fue el R25 que me regaló Renault después del año 2005. De repente, mucha gente quería visitar mi garaje y hacerse fotos con el coche. Entonces dije vale, lo pondré en otro sitio porque no puedo recibir a todos en mi casa”, explicó el piloto español.
El museo de Fernando Alonso
Este entusiasmo de los fans por conocer el famoso monoplaza fue el detonante que lo llevó a abrir el Museo y Circuito Fernando Alonso en su tierra natal, Asturias. Lo que inició como un proyecto sencillo para exhibir un par de coches emblemáticos, pronto se transformó en un ambicioso espacio dedicado a toda su carrera, donde no solo se pueden ver coches de Fórmula 1, sino también sus vehículos del Dakar y Daytona.
Ricardo Morán, gerente del museo y el circuito, cuenta que el museo ha ido creciendo de manera inesperada. «Cuando Fernando y su familia idearon el museo, probablemente no esperaban que les hiciera falta tanto espacio», comenta. Con el paso de los años, el museo ha acumulado nuevos coches, trajes de piloto, cascos, trofeos y memorabilia que Alonso ha ido guardando con dedicación.
Las novedades que se vienen en el museo de Fernando Alonso
La ampliación del museo tiene como objetivo estar lista para el verano próximo, aunque Morán prefiere no concretar fechas exactas. Esta expansión permitirá la entrada de vehículos adicionales, incluyendo el coche de Fernando Alonso del Dakar, el de Daytona y, en el futuro, los Alpine en los que ha competido recientemente. «Vamos a hacer una ampliación para meter unos cuantos coches más. Tenemos el coche del Dakar, el de Daytona, algún día tendremos los Alpine de este año… Y quién sabe lo que nos depara el futuro», asegura Morán, quien destaca que el proyecto se está llevando a cabo con gran entusiasmo.
Pero el crecimiento no se detiene ahí. Además de la ampliación de espacio para exhibiciones, también se contempla la construcción de un edificio dedicado a la Escuela de Seguridad Vial de su fundación. Esta iniciativa educativa contará con un circuito cubierto que será el primero de este tipo en Asturias y uno de los pocos en el noroeste de España. El piloto de Aston Martin busca con este proyecto enseñar a los más jóvenes la importancia de la seguridad al volante, creando un legado que va más allá de su carrera en las pistas.