Siendo quizás algo más propio del cine, nunca hemos visto un coche ardiendo pero sí nos hemos hecho la pregunta… ¿Qué puede hacer que un coche llegue a arder? Realmente, un vehículo en estado normal puede presentar una temperatura de entre 100 y 110º C en funcionamiento, aunque no nos demos cuenta. Si a ello se suma un mantenimiento deficiente y las altas temperaturas del verano, se puede generar como resultado el incendio del coche. No, no es imposible.
El parque móvil envejecido de España, con una edad de 12,3 años de media, no admite dudas en cuanto a llevar a cabo el mantenimiento. Esto resulta fundamental y, sin embargo, en 2018, los españoles invirtieron un total de 582,26 euros en él, un 5,5 % menos de lo que gastaban en los peores años de crisis.
6Carga peligrosa
Al margen del mantenimiento del vehículo, los elementos que se transportan en él son una fuente no despreciable de incendios. Por ejemplo, bidones de plástico con combustible u otros líquidos inflamables. También hay que prestar atención a todos los elementos que transportamos y puedan producir efecto lupa bajo el sol del verano. gafas de sol, botellas de agua… Son objetos aparentemente inofensivos que, no obstante, pueden concentrar el calor del sol en un punto del interior del vehículo e iniciar, de pronto, una combustión.
