Es bien sabido que el coche es una especie de máquina que ha sido perfeccionada durante mucho tiempo pero es cierto que hay que cuidarlo y mucho.
Así que si no quieres romper el motor de tu coche, tras un viaje largo no lo apagues de golpe.
Es cierto que, cada vez más, el coche se está convirtiendo en un elemento de lujo y es que, en ciertas ocasiones, mucha gente no se puede permitir tener una avería.
Los vehículos cuentan con una forma de uso que viene detallada de forma clara y expresa dentro del manual y nadie conduce conforme a lo que dice el manual.
3Es necesario mantener la lubricación del vehículo
En este proceso se corta la actividad del motor de golpe y puede llegar a afectar de forma grave a prácticamente todo el sistema de turboalimentación.
¿Y esto por qué sucede?, pues la respuesta es fácil ya que, después de un viaje un tanto largo solemos apagar el motor del vehículo.
Pues la turbina del turbo va a ser girando debido a la inercia pero no habrá ningún aceite que la pueda lubricar y provocará que acelere el desgaste del mismo además de la posterior rotura.
En el caso de que tengamos la manía adquirida y nos dediquemos a apagar el vehículo de forma automática cuando estacionemos, los rodamientos van a sufrir un exceso.
Lo que suelen aconsejar los expertos es que se estacione el vehículo y que además se deje el motor al ralentí durante por lo menos un minuto.
Durante todo este rato, podremos ir recogiendo todos los objetos que haya en el habitáculo y además aseguraremos que lo dejaremos todo ordenado.
La razón para dejar el coche al ralentí es que el turbo va a estar de forma correcta lubricado con el fin de que los rodamientos de la turbina no lleguen a sufrir.
De esta forma se va a poder minimizar el desgaste de las piezas además de los componentes móviles y se va a ayudar al vehículo a que envejezca de una mejor forma.
