En la historia de la automoción y durante mas de un siglo ya, si hay algún elemento que ha marcado diferencia entre los distintos pasos evolutivos son los motores.
El Dodge Viper es uno de los coches americanos más icónicos, aunque se alejó del concepto tradicional de muscle car. Equipó un motor V10 atmosférico de hasta 8,4 litros en su versión de alto rendimiento, que produjo más de 600 CV en un bólido con una estética brutal. Su motor, por cierto, también se usó en algunas camionetas RAM.