Hay una nueva sentencia judicial, que puede suponer un antes y un después en las multas de velocidad. Comenzó en la autovía madrileña M-30. Un radar cazó a un Audi A3 Sportback circulando a 155 kilómetros/hora. Una velocidad elevadísima si tenemos en cuenta que la zona estaba limitada tan solo a 60.
Este gran exceso de velocidad, con el Código de Circulación en la mano, supone una infracción muy grave, penada con 600 euros de multa y la retirada de 6 puntos del carnet. Te sorprenderá mucho cómo han conseguido librarse de la multa.
4Miles de multas de la DGT en peligro
Al no hacerse cargo de la multa ninguno de los dos conductores, se inició un procedimiento legal. En la fotografía que acompañaba a la sanción no se distinguía bien quién iba al volante. El juez ha calificado esta falta de nitidez como motivo suficiente para anular la sanción, ya que no sería justo multar a uno de los dos sujetos sin tener pruebas evidentes de cuál se encontraba al volante en ese momento.
Esta resolución sentaría un precedente muy peligroso para la DGT, ya que no en todas las fotografías que emiten los radares, se puede apreciar con claridad al sujeto que va conduciendo. Por lo que es de esperar que la DGT presente un recurso contra esta resolución. De mantenerse la resolución se abre una brecha que permitiría poner en duda miles de multas similares.