La seguridad en la carretera no preocupa solo a las autoridades, los conductores son los principales interesados en cuidar su seguridad y también la de su vehículo. Para muchos su coche es como su hijo y les duele cada vez que sufren algún daño, sobre todo les duele en la cartera. Por eso, muchos conductores optan por incorporar en sus vehículos pequeñas cámaras que registren todo lo que suceda a su alrededor.
En otros países llevar una cámara de vigilancia en el parabrisas es algo común, debido a los fraudes en los atropellos. En España esta medida de seguridad está menos implantada, aunque cada vez más conductores se suman a ella. Sí que está más generalizado su uso entre motoristas y ciclistas, que utilizan estas grabaciones para poder denunciar las situaciones de riesgo que sufren a menudo y que amenazan su integridad. Pero, ¿hasta qué punto es legal llevar una cámara en el coche?
1Estas cámaras son imprescindibles en Rusia
Seguro que alguna vez has visto vídeos de recopilaciones de accidentes de tráfico, o de imprudencias al volante. Estos vídeos han podido ser grabados para la historia gracias a las “dash cams” que se colocan en el salpicadero del coche o en el parabrisas. La mayoría de estas temeridades son grabadas en Estados Unidos o Rusia.
Esta coincidencia no se debe a que los estadounidenses y los rusos sean los peores conductores del mundo, sino que a la implantación de estos sistemas de seguridad está mucho más expandida, y la mayoría de conductores siente la necesidad de contar con un sistema de vigilancia en su vehículo para evitar los fraudes a las aseguradoras.