La conducción en invierno encierra más riesgos que en otra época del año. Hay que prestar especial atención a los estragos que pueden causar las bajas temperaturas y mantener una conducción lo más segura posible. Por ejemplo, el frío afecta directamente al tiempo de reacción del conductor, por eso la DGT hace una serie de recomendaciones importantes todos los inviernos.
A parte de ampliar la distancia de seguridad, también recomienda no subir demasiado la temperatura del habitáculo con la calefacción. Pero estas recomendaciones no son las únicas que hay que tener en cuenta. El invierno también trae consigo una serie de comportamientos peligrosos que pueden ser objeto de multa por parte de las autoridades.
4Neumáticos desgatados o inadecuados
Una de las multas más repetidas por la DGT y la Guardia Civil en estos meses invernales es la que hace referencia a llevar unos neumáticos inadecuados o desgastados. En estos meses donde la lluvia y el hielo tienen tanta presencia en la carretera llevar unos buenos neumáticos es indispensable para la garantizar la seguridad vial, por eso la DGT presta especial atención a la vigilancia de las ruedas en invierno.
La banda de rodadura de los neumáticos debe tener una profundidad mínima de 1,6 milímetros. Si está por debajo de esta marca deben cambiarse inmediatamente, aunque la DGT recomienda que tengan al menos una profundidad mínima de 3 milímetros, sobre todo en invierno.
