Periódicamente la DGT lleva a cabo operaciones de control de diversos elementos obligatorios en el coche, como la documentación, o de valoración del estado mecánico y los neumáticos de los vehículos.
Es precisamente esta última una de las campañas más habituales de las que realizan los agentes de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.
3Prueba de la moneda
El método adecuado es contar con un medidor de profundidad, que nos permite conocer la cota en cuestión de segundos. Aunque la profundidad legal debe ser de 16 milímetros la realidad es que la profundidad recomendada debe estar entre 30 y 40 milímetros.
Los neumáticos de los coches cuentan también con unos testigos de goma que afloran conforme nos acercamos al fina de la vida útil del neumático y se va gastando el compuesto.
Hay que tener en cuenta que la profundidad de un neumático es clave en la adherencia, sobre todo cuando circulamos sobre agua. De la profundidad del dibujo depende la evacuación de agua en los charcos o similares, a mayor profundidad mayor cantidad de agua evacuamos en la pisada.