Los neumáticos, componentes cruciales de nuestros vehículos, a menudo nos sorprenden con detalles aparentemente triviales, como esos pequeños ‘pelillos’ oscuros que los recubren, especialmente en los modelos nuevos o poco usados.
Al observarlos, es inevitable preguntarse sobre su propósito y qué sucede si decidimos quitarlos. En este artículo, exploraremos el enigma de estos ‘pelillos’ y desvelaremos su función esencial en los neumáticos.
1El proceso de fabricación y los ‘pelillos’ inevitables
Los ‘pelillos’ que adornan la superficie de los neumáticos son el resultado del complejo proceso de fabricación al que son sometidos. Durante la producción de un neumático, se utiliza un molde recubierto con láminas sucesivas de caucho, incluyendo estructuras metálicas que proporcionan forma y rigidez a los flancos y la banda de rodadura. Estos componentes, junto con el caucho, son sometidos a altas temperaturas y presión durante la fase de cocción. Este proceso es esencial para garantizar la calidad y seguridad del neumático.
Para evitar que los vapores generados durante la cocción formen burbujas que puedan comprometer la estructura del neumático, se incorporan pequeños agujeros en el molde. Estos agujeros permiten que el exceso de caucho escape durante el proceso. Como resultado, los ‘pelillos’ aparecen alrededor del neumático. Aunque estos minúsculos filamentos pueden parecer insignificantes, desempeñan un papel vital en la integridad y el rendimiento de los neumáticos.