El consejero delegado de Nissan, Makoto Uchida, ha comunicado oficialmente que la marca «tiene intención» de cerrar su planta de Barcelona. La factoría echaría el cierre a finales de finales de diciembre y la producción de la marca en Europa se concentraría en la fábrica de Sunderland (Reino Unido). El fabricante mantendría en nuestro país las factorías de Ávila y Cantabria.
«La propuesta del cierre de la planta de Barcelona es el resultado de un extenso estudio para mitigar el exceso de capacidad de producción y mejorar la competitividad general. Esta no es una decisión que estamos tomando a la ligera, sino que es para asegurar el futuro más sólido posible para la marca», explicó Makoto Uchida durante su comparecencia. Un anuncio que dejará sin empleo a unos 3.000 trabajadores directos y otros 13.000 indirectos, ya que la marca cuenta con tres instalaciones en Barcelona: Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca.
Grupo de trabajo
Por su parte, el Gobierno ha propuesto la creación de un grupo de trabajo para estudiar posibles alternativas que garanticen la continuidad de la actividad industrial en esta factoría, que comenzó a producir vehículos en 1983. De hecho, el Gobierno ya ha anunciado que cerrar la planta le costará a la marca unos 1.000 millones de euros mientras que mantenerla abierta supondría mucho menos, unos 300. Genís Alonso, consejero director general de Nissan Motor Ibérica, ha cesado en su cargo y, para pilotar las conversaciones, se ha puesto al frente a Frank Torres, vicepresidente ejecutivo de Nissan para Rusia que, mientras dure el proceso de negociación, asumirá la responsabilidad de todas las operaciones industriales de Nissan en España.
Operaciones en España
Nissan fabrica en Barcelona la furgoneta 100% eléctrica e-NV200 y el pick-up Navara y también ha ensamblado las variantes de este pick up para Mercedes y Renault: el Clase X y el Alaskan. En España, la marca también fabrica componentes para las plantas de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, tiene un centro de I+D para toda Europa, un centro de distribución y otro de recambios. Barcelona acoge la sede comercial para España y Portugal y cuenta con más de 200 puntos de venta y postventa.
El anuncio del futuro cierre de la planta de Barcelona llega solo un día después de que la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi planteara un liderazgo de sus fabricantes por regiones, de modo que Nissan se convertirá en referente en China, Norteamérica y Japón; Renault en Europa, Rusia, Sudamérica y África del Norte; y Mitsubishi Motors en el sureste asiático y Oceanía.