La seguridad de los niños en los vehículos es una cuestión primordial que no puede pasarse por alto. Los sistemas de retención infantil desempeñan un papel fundamental en la protección de los más pequeños durante los desplazamientos por carretera. Su correcta utilización y cumplimiento de las regulaciones son responsabilidades ineludibles de los padres y tutores, ya que contribuyen a minimizar el riesgo de lesiones graves en caso de accidente.
Sin embargo, lo que muchos desconocen es que a partir del 1 de septiembre, se implementaron cambios significativos en la normativa europea que rige estas sillas, la cual pasó de la antigua norma R44 a la renovada R129. En este artículo, exploraremos en detalle estos cambios y su impacto en la seguridad de los niños en los vehículos.
6Preferencia por el sistema de retención Isofix
La R129 enfatiza la necesidad de que las sillas infantiles sean más compatibles con los automóviles modernos. Esta medida busca una integración más efectiva de las sillas en los vehículos, mejorando la estabilidad y la seguridad en caso de accidente.
La norma R129 da prioridad al uso del sistema de retención Isofix, que utiliza puntos de anclaje específicos en el vehículo para fijar la silla infantil de manera segura. Esto elimina la necesidad de utilizar el cinturón de seguridad del automóvil como elemento de sujeción y simplifica la instalación, reduciendo la posibilidad de errores.