La marca de los tres diamantes encara el futuro más inmediato con las mejores perspectivas y en las mejores condiciones de los últimos tiempos. La marca, que básicamente tenía como único modelo con proyección el Mitsubishi Eclipse Cross, se encuentra ahora con el nuevo ASX y el inminente Colt como grandes argumentos para dar respuesta a lo que demandan los amantes de la marca japonesa.
Empezando por lo más antiguo, el presente de Mitsubishi se llama ASX. El SUV compacto que se fabrica en Valladolid, en la factoría de Renault, se ha convertido en un éxito de ventas. De hecho, en menos de un año en el mercado, ya es el modelo más vendido de la marca, adelantando al Eclipse Cross. Y en 2024 el objetivo del año completo es un crecimiento importante para este modelo del que se ofrecen versiones de gasolina, híbrido ligero, híbrido convencional y también enchufable. Una versión, por cierto, que ya no ofrece Renault para su Captur, el gemelo de este ASX.
El Mitsubishi Colt repite la fórmula Renault del ASX
Saboreando el triunfo del ASX, en la marca se preparan para el –previsible- siguiente éxito: el Colt. La estrategia es la misma, utilizar los acuerdos de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi para poner los tres diamantes en el capó del Clio. Y de paso contar con la tecnología híbrida que la marca francesa ofrece en su utilitario. La llegada del nuevo Mitsubishi Colt va a empezar a producirse a partir del mes de enero y lo va a hacer con una propuesta de motores que contempla versiones de combustión clásica –gasolina de 67 y 91 caballos- además de un híbrido autorrecargable con 143 caballos bajo el capó.
Y no va a quedar ahí la cosa. Todo indica que otro de los último grandes éxitos de la marca, y precursor de los PHEV, el Outlander, vuelve al mercado este año. El SUV japonés lo hará, evidentemente, con tecnología hibrida enchufable –en la que son especialistas- y un diseño completamente nuevo, adaptado a los nuevos rasgos de la firma.
Tres novedades a la que podría sumarse el renovado pick up L200, uno de los clásicos del segmento. Y con ellos, más el Eclipse Cross, que ya solo se ofrece con propulsión híbrida enchufable, la marca tiene por delante un año con argumentos para crecer de manera apreciable.