Las altas prestaciones no están reñidas con la electrificación. Ni mucho menos. En Opel lo saben y no están dispuestos a renunciar a la deportividad en este tipo de coches. Por eso recientemente ha lanzado modelos como el Astra GSe y su variante familiar Astra Sports Tourer GSe. Ahora llega el turno del Opel Grandland Gse.
Un SUV PHEV de altas prestaciones
Los SUV de altas prestaciones combinan el ritmo de los deportivos con versatilidad y estilo. Ofrecen dinamismo y tracción total, con lo que ejercen un fuerte atractivo para el conductor. Actualmente se encuentran con mayor frecuencia en el segmento premium, pero con el nuevo Opel Grandland GSe también se estrenará pronto un SUV de altas prestaciones en el popular segmento C.
“El nuevo Opel Grandland GSe es excepcionalmente dinámico, capaz y elegante. Estamos seguros de que atraerá a los clientes que no sólo buscan un SUV electrificado, sino también una conducción deportiva”, afirma el director general de Opel, Florian Huettl.
El nuevo Grandland GSe combina un motor de gasolina 1.6 turboalimentado y dos motores eléctricos, uno en cada eje, con los que desarrollan una gran potencia en conjunto, de hasta 221 kW/300 CV (consumo combinado de 1,3 litros).
El Opel Grandland GSe alcanza los 235 km/h
La mecánica híbrida enchufable convierte al Grandland GSe en un vehículo de tracción total permanente eléctrica con una tracción óptima y una respuesta inmediata desde parado líder en su categoría. La aceleración de 0 a 100 km/h la cubre en 6,1 segundos, como un deportivo, y alcanza una velocidad máxima de 235 km/h (hasta 135 km/h en modo eléctrico).
Al igual que en sus hermanos Astra GSe, los requisitos previos para conseguir en el Opel Grandland GSe un carácter especialmente dinámico y una gran diversión a su volante residen en la exclusiva puesta a punto de su suspensión y de la dirección.
Puesta a punto específica para el Opel Grandland GSe
Con un esquema de tipo McPherson en el tren delantero y un eje multibrazo en el trasero, el SUV más deportivo de Opel cuenta con amortiguadores y muelles más firmes con tecnología KONI FSD, que permiten diferentes características de amortiguación enfocadas al dinamismo y el confort. Como resultado, el Grandland GSe responde de forma inmediata y predecible a cada acción del conductor, al tiempo que mantiene la estabilidad característica de los modelos de Opel en las frenadas y las curvas.
El diseño exterior audaz y puro del Grandland con el frontal característico de la marca, el Opel Vizor, se refuerza con los rasgos de estilo propios de los GSe: con las llantas de llamativa ligera de 19 pulgadas inspiradas en el premiado prototipo Manta GSe; un difusor trasero único y el logotipo GSe en el portón trasero.
Como un rasgo distintivo adicional, el Grandland GSe está disponible opcionalmente con el capó en negro. En su interior los asientos delanteros de elevadas prestaciones con certificación AGR son una muestra más de la excelencia de Opel en cuanto a la ingeniería de asientos. Garantizan que tanto el conductor como su acompañante a la derecha pueden disfrutar con el Grandland GSe de una conducción dinámica mientras sus columnas se benefician del confort y sujeción adicional de unos asientos excepcionalmente ergonómicos.
