Hace un par de meses ya avanzamos cómo sería el nuevo Renault ZOE acudiendo a un intenso seminario técnico que nos revelaba sus numerosos cambios y mejoras. Ahora hemos tenido, por fin, la oportunidad de poder conducirlo y asimilar las primeras conclusiones de un modelo que abrirá su cartera de pedidos en noviembre. Las primeras unidades llegarán ya en enero de 2020.
Los cambios son significativos, pero no podemos hablar de una nueva generación en sí misma. Esta llegará en la próxima generación, ya sobre una nueva plataforma que se está desarrollando en el ámbito de la Alianza, junto a Nissan y Mitsubishi, entre otros. Y es que los planes de Renault pasan por ofrecer el 50 por ciento de su gama ya electrificada en 2022, con ocho modelos totalmente eléctricos (actualmente comercializa cuatro). Aclarado este punto, tampoco se puede decir que el ZOE se someta a un simple 'lavado de cara', porque los avances de fondo tienen un gran peso específico, sobre todo tecnológicamente.
Nueva toma de carga de 50 KW
Por fuera ofrece un diseño más dinámico. No cambian las dimensiones exteriores, pero sus trazos son más limpios e incorpora faros Full Led de serie delante y detrás. La toma de carga frontal amplia su tamaño debido a que ahora contempla, además, una toma de carga rápida en corriente continua de 50 Kw. Nuevos colores y renovados diseños de llantas de 15 a 17 pulgadas completan su imagen exterior.
Más radical si cabe es la transformación del interior, heredada en gran parte del Clio. El cuadro de mandos de 10 pulgadas es totalmente digital en toda la gama, la pantalla multimedia táctil del salpicadero, de formato vertical y 9,3 pulgadas, nos da acceso a información relacionada con la navegación y el entretenimiento, y en la consola central encontramos una nueva palanca de cambio flotante que libera espacio para ofrecer ahora un cargador inalámbrico por inducción del smartpghone y un freno de estacionamiento eléctrico. Destacar, asimismo, los nuevos acabados realizados con materiales reciclables, aprovechando cinturones de seguridad y botellas de plástico.
No hay cambios en habitabilidad o capacidad del maletero, aunque la iluminación del interior es ya totalmente LED y se contemplan dos cargadores USB en las plazas traseras, por cierto, amplias para el tamaño compacto del vehículo.
Hasta 395 kilómetros de autonomía
La gran novedad tecnológica recae sobre la nueva batería de iones de litio con 52 Kw de capacidad y que permite homologar hasta 395 kilómetros de autonomía con el nuevo ciclo WLTP. Esto supone un 25 por ciento más con respecto a la de 40 Kw que portaba hasta ahora. Además, monta un nuevo motor eléctrico que ofrece 100 KW (135 CV) de potencia (en este caso la autonomía es de 386 kms), y el mencionado cargador rápido de corriente continua de 50 KW.
La batería mejora sus prestaciones sin incrementar el tamaño. En la misma carcasa se incorporan más módulos gracias al espacio libre disponible en altura. Esto provoca un 80 por ciento más de la capacidad. El 20 por ciento restante corresponde a la mejora de los componentes químicos. El peso sí que se incrementa en 20 kilos respecto a la de 40 KW ; el peso total del vehículo es 45 kilos superior debido a que se introducen también nuevos componentes y equipamientos, como unos discos de freno traseros (antes tambores). La batería está refrigerada por aire.
Los tiempos de carga salen, igualmente, beneficiados. Con la nueva toma de 50 KW en apenas 30 minutos podemos completar un 80 por ciento de la capacidad, suficiente para recorrer alrededor de 150 kilómetros. De esta manera ya se pueden afrontar largos desplazamientos con mayor 'tranquilidad'. Además, se mantienen el resto de posibilidades contempladas hasta ahora. En casa con un Wallbox de 7 KW en 9 horas y 25 minutos completaremos el ciclo total; en una toma de 11 KW en dos horas cargaremos para recorrer 125 kilómetros, y en una de 22 KW el tiempo se limitará a una hora para esa misma distancia.
Motor eléctrico de 135 CV
Nuevo también es el propulsor eléctrico de 100 KW (135 CV) y 245 Nm de par máximo, opción que brinda un nuevo impulso al ZOE. Se mantiene la opción del propulsor R 110 CV, pero la mejora es evidente, ya que con el más potente el vehículo alcanza los 140 km/h (limitada) y acelera de 0 a 100 km/h en 9,5 segundos. Por poner números sobre la mesa, en una recuperación de 80 a 120 Km/h se mejora en 2,2 segundos el tiempo respecto a la variante de 108 caballos.
Este motor se gestiona por medio de una nueva caja de cambios automática de un sola relación. La nueva palanca introduce un dispositivo electrónico e-shifter que permite manipularla con simples impulsiones. Asimismo, se incorpora un programa 'B' que multiplica el efecto de la frenada regenerativa y nos libera de tener que pisar el pedal del freno con tanta asiduidad. No es tan 'radical' como el que emplea el Nissan Leaf, su primo hermano', pero sí que resulta más eficiente de cara a la autonomía.
Hemos probado el nuevo ZOE en un sinuoso recorrido por carretera, bordeando la atractiva Costa Esmeralda (Cerdeña). Nada de ciudad ni autopista, dos escenarios habituales para los que utilizan este tipo de vehículo por la gran urbe y sus accesos. En cualquier caso es una apuesta agresiva para comprobar su autonomía y prestaciones con la nueva combinación Z.E. 50 asociada al propulsor R135.
Consumos atractivos
Vamos dos personar por vehículo y con la climatización funcionando, por cierto, ahora con bomba de calor en sustitución de las tradicionales resistencias. Realizamos un primer recorrido de 140 kilómetros, con el modo ECO activado y realizando un tipo de conducción bastante eficiente. Completamos la distancia con un consumo medio de 12,7 KWh en el ordenador de viaje y nos queda un 65 por ciento de la batería. La velocidad medía ha sido de 65 km/h.
El regreso lo realizamos sobre un trazado de 90 kilómetros, más sinuoso si cabe. En esta ocasión desconectamos el modo ECO, aspecto que nos permite disfrutar de una reacción más inmediata al pisar el acelerador. Se nota y mucho. Sin tanto miramiento hacia la eficiencia nos quedamos un tanto sorprendidos porque el consumo medio refleja 14,4 KWh a la conclusión, aunque en ocasiones vimos 19,0 en zonas donde disfrutamos a tope de su máximo rendimiento. Al final el tráfico se complica y la velocidad media se reduce hasta clavar casi los mismos 65 km/h de media. Comprobamos que todavía resta un 34 por ciento de la capacidad de la batería. No está nada mal tras recorrer 230 kilómetros en total. Son cifras un tanto orientativas a la espera de realizar unas mediciones más severas cuando el ZOE pase por nuestro centro técnico. El consumo medio homologado es de 17,7 KWh.
Más equipamiento
La nueva arquitectura eléctrica también ha permitido introducir novedosos asistentes a la conducción. En este sentido el renovado ZOE contempla elementos como un reconocimiento de señales de tráfico, luces de carretera inteligentes, control del ángulo muerto, función Auto-Hold, alerta de velocidad excesiva, frenada de emergencia en ciudad, alerta de cambio de carril con función de modificación de la trayectoria, aviso de salida de la vía, sistema de aparcamiento manos libres…
También se incluye el asistente Renault Easy Connect enfocado a facilitar la vida de todos sus ocupantes. Así desde el smartphone podemos comprobar a distancia el nivel de carga, planificarla, lo mismo con la climatización, buscar puntos de recarga libres, afrontar la ruta más adecuada en el navegador…
El ZOE se comercializará con la versión R110 Z.E. 50 con acabado Intens y con el R135 Z.E. 50, que añade el acabado Zen. Renault todavía no ha hecho públicos los precios, aunque mantendrá la posibilidad de adquiir la batería en propiedad o en régimen de alquiler.
