Cuando una marca lanza una nueva generación de uno de sus modelos no siempre acierta con las mejoras. Sin embargo Volkswagen ha preparado una segunda entrega de su Tiguan que por un lado mantiene lo mejor del modelo que ha asegurado a la marca 9 años de éxitos, y por otro mejora todo lo que más habíamos criticado la prensa especializada y muchos clientes. El resultado es un todocamino más grande, seguro, robusto, conectado, habitable y elegante que definitivamente roza el mundo premium con equipamientos de segmentos superiores, motores diésel de hasta 240 caballos y un sistema de tracción total mucho más completo acompañado,si se quiere, de una estética Off Road alternativa mucho mas convincente.
El tercer modelo más importante para Volkswagen después del Polo y el Golf, estrena plataforma MQB A2 (MQB A1 la del Golf, León o Ateca) lo que implica crecer a lo largo y a lo ancho pero a su vez reducir su altura. Además su distancia entre ejes crece nada menos que 77 milímetros. Y sus lineas exteriores son más angulosas aunque el coeficiente aerodinámico ha mejorado pasando de un Cx de 0,37 a uno de 0,32. Además, el espacio en las plazas traseras cuenta con 29 milímetros mas para las rodillas y el maletero aumenta 50 litros y pasa a tener 520 litros con la banqueta trasera en posición normal (615 con ella desplazada totalmente hacia delante). Este tamaño del maletero, cuyo borde carga también se ha rebajado ante las críticas en el modelo anterior, es común a los Tiguan de tracción delantera y a los de tracción total, todos con eje trasero multibrazo, a diferencia del Seat Ateca que cuando lleva tracción delantera lleva eje torsional en el eje trasero y su maletero cubica 510 litros y que cuando lleva montada la tracción total utiliza un eje trasero multibrazo y su maletero se reduce hasta los 485 litros.
Más espacio interior
El espacio en el interior del nuevo Tiguan es tan generoso que ahora puede conducir cómodamente una persona de 1,86 metros de altura y detrás a otro ocupante de talla idéntica le sobrarían casi 10 centímetros para que sus rodillas rozasen con el respaldo delantero. Incluso la disminución en la altura total del coche no ha influído en la cota de altura detrás que se mantiene como una de las mejores del segmento. Volkswagen ha mantenido de serie y con buen criterio la banqueta trasera desplazable y los respaldos reclinables, muy prácticos a la hora de distribuir bien ocupantes y equipaje ante un largo viaje o para ir durmiendo con el respaldo algo tumbado. Otra mejora clara, también criticada hasta ahora, es la posición del conductor y su acompañante, que ahora se aprovechan de unos nuevos asientos 'Ergo Active' 8 milímetros más altos y con una combinación de espumas y bastidor mejorados. El conductor agarra el volante ahora de una forma más natural.
Como no podía ser de otra forma, una de los aspectos más cuidados en el nuevo Tiguan es la calidad, tanto de los ajustes como de los materiales. Es verdad que hay mucho plástico duro a la vista, algo común a todos los rivales, pero salta a la vista que es un tipo de plástico de altísima calidad y así lo transmite. También se ha mantenido el excelente nivel de ergonomía típico de la marca con una correctísima ubicación de todos los mandos, lo que hace sentirse como en casa desde el minuto uno.
Mejora el comportamiento
La mayor distancia entre ejes del nuevo Tiguan junto a una notable reducción de peso y un aumento en la resistencia a la torsión, propician que el Tiguan gane en comportamiento en carretera y mejore su respuesta en uso off road. No es que la ganancia sea brutal en asfalto porque el que deja el testigo ya iba de cine, sin embargo la mejora se nota en unos cuantos detalles individuales que sumados permiten que notemos mayor aplomo y un tacto de conducción que transmite más seguridad. Se mantiene e incluso aumenta la sensación de solidez y la de estar conduciendo un gran coche por respuesta mecánica, robustez, eficacia y amplitud.
Pero si en carretera el nuevo Tiguan gana en tacto y se vuelve incluso más agradable, en el campo el nuevo todocamino mejora sus prestaciones para que los pocos que compren una versión 4Motion de tracción total y salgan del asfalto tengan la respuesta esperada. Además, la quinta generación del 4Motion cuenta con el sistema Active Control que incorpora un interruptor giratorio para activar cuatro modos de conducción: 'Snow', 'On-road', 'Off -road' y 'Off-road Individual'. El embrague Haldex antúa como diferencial longitudinal y el sistema de bloqueo electrónico de diferencial EDS, actúa como diferencial transversal en todas las ruedas. Para los más aventureros el nuevo Tiguan también dispondrá de una versión ?Off-road? (335 euros) con un frontal diferente y más atractivo que el que lucía el modelo anterior. En este caso la altura libre al suelo aumenta de los 189 a los 200 milímetros y el ángulo de ataque pasa de 16º a 25,6º además de incorporar bajos protegidos y pasos de rueda en negro
Por ahora sólo dos motores
De momento los Tiguan que se empiezan a entregar en mayo solo estarán disponibles con dos motores, uno de gasolina TSI de 180 caballos disponible desde 42.200 euros y uno TDI de 150 caballos que se vende a partir de 29.560, aunque el equipamiento de ambos se enriquece con motivo del lanzamiento con paquetes adicionales sin cargo que convierten al nuevo Tiguan en un modelo muy competitivo. Pero vendrás muchso más, por ejemplo este mes de abril ya se pueden hacer pedidos de la versión 2.0 TDI de 190 caballos con cambio DSG y tracción total, en mayo de los 1.4 TSI de 125 y 150 caballos tracción delantera y 2.0 TDI de 115 delantera y 150 delantera con cambio DSG y ya en junio la cuarta oleada incluirá el 2.0 TDI biturbo de 240 caballos con cambio DSG y tracción total.
Los equipamientos incluyen ya asistentes de seguridad completísimos, sistemas de conectividad total, climatronic de 3 zonas, faros Full LED, cuadro de instrumentos Digital Cockpit configurable, 4 cámaras de video con Area View y visión perimetral, porton trasero de apertura automática presencial y un largo etcétera. Y desde la versión básica denominada Edition, el equipamiento no deja en el tintero nada de lo que alguien espere en un todocamino de menos de 30.000 euros.
