En los últimos años, las normas de tráfico y medioambientales han evolucionado significativamente, especialmente en las ciudades. Una de las medidas más visibles ha sido la implementación de etiquetas medioambientales para clasificar los vehículos según su nivel de emisiones contaminantes. Sin embargo, ¿es obligatorio llevarla en el parabrisas del coche? En este artículo, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre esta normativa.
1La función de las etiquetas medioambientales
Las etiquetas medioambientales de la Dirección General de Tráfico (DGT) fueron creadas para identificar la eficiencia ecológica de los vehículos. Clasifican los coches en cuatro categorías: Cero, Eco, C y B. Estas clasificaciones determinan el nivel de restricciones que un vehículo puede enfrentar en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) establecidas en muchas ciudades españolas.
Tener la etiqueta adecuada puede facilitar el acceso a áreas restringidas, evitar sanciones y disfrutar de ventajas como reducciones en impuestos y estacionamiento gratuito. Además, para ciertos vehículos, como los híbridos enchufables, obtener un distintivo superior tras modificaciones es un incentivo importante para adaptarse a las normativas.