Un informe del año pasado de la OCU revela el mal funcionamiento de las etiquetas medioambientales y pone en entredicho algunas motorizaciones de los híbridos enchufables. Algunos contaminan mas que los tradicionales, mientras que el motor de combustión ve prohibida la entrada a sitios donde los primeros siguen contaminando.
3La paradoja de las etiquetas medioambientales
El estudio se centra en efectuar una valoración de conjunto determinando el flujo de emisiones y la concentración de CO2, NOx y micropartículas, cuando la motorización hace uso de la combustión, mientras que en el caso de los coches eléctricos, se estudia la contaminación al producir la electricidad que recarga sus baterías.
Los resultados del análisis de los 147 vehículos analizados por OCU (actualmente a la venta) muestran que, coches con la misma etiqueta etiqueta ambiental de la DGT pueden tener niveles de emisiones muy diferentes.
Esta paradoja tiene su fundamento en la metodología de clasificación, que la DGT y el ministerio de industria establecen con las etiquetas medioambientales, ya que esta estipulada en base a las motorizaciones y en función de su fabricación y matriculación o puesta en circulación, y no, como bien dice la OCU que debería, por sus emisiones contrastadas de gases.
