El referéndum en París que aprobó triplicar el precio de estacionamiento para vehículos de más de 1,600 kilos, comúnmente asociados a SUV, revela una realidad más compleja detrás de la cruzada anti-SUV que se ha promovido en varias ciudades.
Aunque se ha vendido como una medida para reducir la presencia de vehículos grandes y contaminantes, en realidad, la penalización se basa en el peso del vehículo, afectando incluso a híbridos enchufables y eléctricos de mayor tamaño.
1Una medida de desincentivo económico en París
La alcaldía de París aplicará una tarifa de estacionamiento de 18 euros la hora para SUV en el centro de la ciudad (12 euros en la periferia), con un coste de 225 euros por un estacionamiento de seis horas. Aunque la medida no prohíbe la circulación de estos vehículos, busca desincentivar su uso mediante tarifas prohibitivas.
La penalización se aplicará principalmente a visitantes que viajen en vehículos de gran tamaño, estimándose que afectará al 10% de los vehículos que aparcan en la ciudad, generando una recaudación de aproximadamente 35 millones de euros anuales.