El alquiler de coches se presenta como una de las mejores soluciones para disfrutar de la libertad de moverse durante un viaje de vacaciones. Sin embargo, tanto en España como en el resto de Europa, hay un aspecto importante que no se puede pasar por alto: las multas de tráfico asociadas a este tipo de alquiler.
Es un hecho innegable que, aunque se conduzca un vehículo de alquiler en otro país, las sanciones por infracciones de tráfico continuarán llegando a casa y se harán efectivas. No importa que las matrículas estén registradas bajo el nombre de la agencia de renting, el conductor y usuario del coche es el responsable de cualquier falta que se cometa al volante de dicho vehículo.
2Así debes abonar la multa de tráfico
Para abonar la multa, será necesario seguir las instrucciones que se indiquen en el expediente. Asimismo, si la multa proviene del extranjero y está escrita en un idioma diferente al español, existe la posibilidad de recurrirla alegando indefensión. En estos casos, un toque de creatividad puede ser útil para buscar excusas legítimas.
Es importante señalar que las empresas de alquiler suelen cargar un recargo en la tarjeta de crédito o débito proporcionada al firmar el contrato, como compensación por la gestión de los datos ante las autoridades de tráfico. Este recargo suele rondar los 40 euros, aunque puede variar entre compañías. No obstante, si la multa es notificada en el momento, la agencia no realizará ningún trámite adicional, lo que brinda al conductor la opción de pagar la sanción de manera inmediata y evitar el pago del trámite.