Los patinetes eléctricos, que llegaron a nuestras calles a finales de la pasada década, han ido modificando el paisaje urbano y cada año el número de usuarios de estos vehículos crece sin parar.
La proliferación de este vehículo en el entorno urbano ha derivado en un mayor celo por parte de las autoridades y, lógicamente, en el incremento de la tasa de accidentes en los que se ven envueltos los patinetes eléctricos.
Los datos de siniestralidad que arrojan las distintas valoraciones de años anteriores invitan a prever los posibles cambios que sobre este tipo de movilidad podemos sufrir, no en vano cada 27 horas ocurre un accidente de patinete eléctrico en España.
2Desde el Pais Vaso y su Diario
En Donostia, donde se rigen desde marzo del año pasado por la Ley Estatal de la DGT para Vehículos de Movilidad Personal, desde enero de 2022 se registran los datos de cómo han sido los accidentes con patinetes eléctricos de por medio. Así, se sabe que de los 74 siniestros del pasado año 33 fueron caídas en solitario, seis fueron atropellos a peatones, otros seis fueron choques contra bicicletas en bidegorri, 19 con vehículos a motor implicados en la colisión y los restantes fueron catalogados como ‘no especificados’.
En este sentido, desde el Ayuntamiento de Irun, otro gran núcleo urbano de Gipuzkoa, indican que solo en 2023 «ya se han interpuesto una docena de multas por circular por las aceras». En Donostia tampoco está permitido ir por las aceras, y este es el principal motivo por el que impusieron cerca de 30 multas -200 euros de sanción cada una- entre 2020 y 2021.