Los peatones son una parte fundamental de la seguridad vial. La DGT y demás organismo velan por su seguridad y establecen normas que también deben cumplir, para que la convivencia con los coches sea lo más segura posible. Tanto es así, que los patones tienen un capítulo entero del Reglamento General de Circulación dedicado a ellos.
Cuando somos peatones estamos expuestos a un gran peligro que no hay que pasar por alto: el riesgo de atropello. Se contabilizan cada año más de 10.000 atropellos en España, según un informe elaborado por el RACE y Goodyear. De este informe se extrae que la mayoría se producen en casco urbano, aunque los que tienen siempre consecuencias más graves se dan en carretera.
3Nunca cruces sin mirar aunque haya un paso de peatones
El mayor peligro para los peatones ocurre al tener que cruzar la calle. Nueve de cada diez atropellos ocurren en ciudad y viene motivados por estos momentos en los que el peatón debe abandonar la acera para cruzar al otro lado de la calle.
La DGT recuerda que cuando vas a cruzar la calle como peatón debes comprobar que “el conductor te ha visto y tiene intención de parar”. Aunque el conductor tenga la obligación de dejarte pasar porque hay un paso de cebra, puede que vaya despistado y acabe en un accidente con peores consecuencias para el peatón. La estrategia que debes aplicar como peatón al cruzar la calle según la DGT es la siguiente: “mirar a la cara al conductor para ver si te mira. Si está mirando para otro lado mejor no cruces, porque puede que no te haya visto”.