En 2013, se podría decir que todo cambió… o que, al menos, parecía que iba a cambiar. La Dirección General de Tráfico (DGT) presentó sus famosos helicópteros Pegasus, que prometían ser una pesadilla para los conductores que infringieran las normas de tráfico. Estos helicópteros estaban equipados con tecnología avanzada, incluyendo radares capaces de medir la velocidad de los vehículos a larga distancia.
Sin embargo, una década después de su debut, los Pegasus de la DGT ya no imponen el mismo temor, y esto se debe a diversas razones que han llevado a que dejen de operar en numerosas regiones de toda España.
3Limitaciones geográficas y de competencia
Además de los problemas tecnológicos y los accidentes, la DGT tiene limitaciones geográficas en cuanto a sus competencias de tráfico. La DGT no tiene jurisdicción en Cataluña, País Vasco y Navarra, lo que significa que en estas regiones los helicópteros Pegasus no llevan a cabo labores de vigilancia.
En resumen, los famosos helicópteros Pegasus de la DGT, que en su momento prometieron ser una pesadilla para los conductores infractores, se han visto obstaculizados por accidentes, problemas técnicos y limitaciones geográficas y de competencia. Esto ha llevado a que una gran parte del territorio español carezca de la capacidad de control que estos helicópteros ofrecían en un principio.