La mitad del parque automovilístico español esta integrado por vehículos limpios, esos cuyos dueños empezarán a recibir de forma gradual las etiquetas identificativas de sus niveles de contaminación, que la DGT empezará a envíar en cuanto se publique en el BOE la clasificación de vehículos en función de la contaminación que emiten.
El objetivo es discriminar positivamente las unidades mas respetuosas con el medio ambiente, facilitando su reconocimiento en beneficios fiscales o relativos a la movilidad y el medio ambiente.
Cuatro clasificaciones
La clasificación, consignada en el registro nacional de vehículos de la DGT, integra cuatro categorías: Cero emisiones, que señala un distintivo azul para los vehículos más limpios; Eco, pegatina azul y verde para hibridos enchufables con menso de 40 km de autonomía, híbridos, de gas natural o gas licuado que cumplan los requisitos de la etiqueta C; Categoría C, que designa un distintivo verde e incluye turismos y furgonetas ligeras, que cumplan la Euro 4,5 y 6 en gasolina y la Euro 6 en diésel; Categoría B, una etiqueta amarilla que señala los turismos y furgonetas ligeras Euro 3 de gasolina y Euro 4 y 5 en diésel.
El resto del parque español será clasificado con posterioridad y cada autoridad con competencia en materias relativas a la fiscalidad, movilidad y medio ambiente podrá decidir que incentivos ofrece a los vehículos menos contaminantes en su ámbito de competencia, como circular por el bus VAO a los «Cero emisiones», que ya se permite.
