comscore

La peligrosa acción que ha aumentado un 19% en el último mes cuando conduces

Conducir bajo la lluvia siempre es un desafío. Este marzo, las condiciones meteorológicas han puesto a prueba a miles de conductores en España. Las fuertes precipitaciones han generado situaciones de riesgo en las carreteras, especialmente debido a maniobras peligrosas como los frenazos bruscos, que han subido un 19% en lo que va de mes.

El dato, proporcionado por Geotab, líder en soluciones para vehículos conectados, pone de manifiesto una realidad preocupante: la tendencia a reaccionar instintivamente ante el peligro, por encima de una conducción segura. El aumento del 14% en maniobras bruscas indica que la falta de previsión está jugando un papel clave en la siniestralidad vial.

1
La lluvia y sus efectos en la conducción

Fuente propia

La lluvia cambia por completo las condiciones de la carretera: reduce la adherencia de los neumáticos y aumenta la distancia de frenado. A medida que el agua se acumula sobre el asfalto, los vehículos necesitan más tiempo y espacio para detenerse de forma segura. Sin embargo, muchos conductores no ajustan su velocidad ni su conducción a estas condiciones, lo que provoca reacciones bruscas y peligrosas.

Cuando el suelo está mojado, la capacidad de control del coche disminuye drásticamente. El miedo a perder tracción lleva a muchos conductores a pegar un pisotón al freno, algo que solo agrava la situación. En lugar de ello, lo recomendable es realizar frenadas progresivas y anticiparse a las condiciones del tráfico, para evitar maniobras repentinas que puedan derivar en accidentes.

Espalda