Alquilar un coche es una de las mejores maneras de descubrir un país a tu ritmo. Sin embargo, no todas las carreteras europeas son igual de seguras ni la experiencia de conducción es siempre placentera. La calidad de las vías, la siniestralidad y los precios de alquiler pueden convertir el viaje en un auténtico quebradero de cabeza.
A continuación, te presentamos los diez países europeos en los que conducir un coche de alquiler puede ser más problema que ventaja. Si estás planeando un viaje a alguno de estos destinos, después de leer este artículo quizás quieras considerar otras alternativas de transporte.
6Chipre: vías estrechas a distinto sentido

Si no estás acostumbrado a circular por la izquierda, mejor piénsalo dos veces antes de viajar a Chipre. Puede ser todo un reto para cualquier turista. Además, aunque tiene un índice de calidad muy decente, del 5,22 sobre 7, la mayoría de sus carreteras son estrechas y peligrosas, lo que puede afectar a la conducción.
El precio del alquiler de un coche empieza en 25 € diarios; pero si no te vas a sentir cómodo conduciendo en sentido contrario al habitual en la mayoría de países de Europa, será mejor que consideres otras opciones. Algunas zonas montañosas tienen carreteras en mal estado; un problema añadido para los conductores menos experimentados.