La transición ecológica está impulsando con viento a favor al Grupo PSA, que lleva años apostando por la electrificación de su gama. De hecho, en 2025 todos los modelos que ponga en juego tendrán, al menos, una variante electrificada (actualmente ofrece un 50 por ciento). No es una moda, es una necesidad. Y un claro ejemplo es el Peugeot 508, que a comienzos de año actualiza su gama de propulsores, siendo el diésel el gran perjudicado, ya que será una oferta prácticamente residual.
Las ventas de PHEV se disparan
La exigente normativa europea en materia de emisiones provoca esta decisión e impulsa claramente a las versiones híbridas enchufables, que van ganando terreno día a día. De hecho esta tecnología prácticamente ha multiplicado por cuatro sus ventas en el mercado español en los dos últimos años.
Peugeot se encuentra a gusto en este terreno porque ha hecho los deberes a tiempo. En nuestro mercado es la segunda marca con más unidades vendidas en vehículos eléctricos, gracias al gran éxito del e-208 y la llegada del e-2008, y la tercera en híbridos enchufables, donde el 3008 PHEV ya vende lo mismo que el gran dominador hasta el momento, el Kia Niro, y el 508 PHEV suma gracias a sus dos carrocerías, berlina y SW de corte familiar. De hecho, si sumamos la tecnología eléctrica e híbrida enchufable, Peugeot es la marca que lidera el mercado español en los 10 primeros meses del año, con 3.072 modelos vendidos y una cuota del 12,05 por ciento.
Tarifa similar a un térmico
Clave en todo esto, además de una gama atractiva y avanzada tecnológicamente, es saber comunicar que el precio no tiene que ser una barrera. Quizás pagemos más de inicio, pero un vehículo electrificado aporta beneficios extra, como un mayor aporte en planes como el Renove, un menor consumo o ventajas a la hora de estacionar o acceder a la gran ciudad. En la marca aseguran que un 508 PHEV con 225 CV resulta hasta 35 euros más barato en la cuota mensual que un 508 BlueHDI 130 CV también EAT8 y aportando la misma cantidad en la entrada.
Peugeot también ha aprovechado la ocasión para actualizar su gama de acabados en la gama 508. A partir de ahora ofrecerá tres niveles, Allure, GT Line y GT, y luego cada uno de ellos se podrá combinar con diversos paquetes para completar la dotación.
225 CV y tracción delantera
En plena fiebre SUV, se agradece poder disfrutar también del confort y la dinámica que ofrece una berlina como el 508 PHEV. Su sistema híbrido enchufable está compuesto por un motor de gasolina 1.6 PureTech de 180 CV y un propulsor eléctrico de 80 kW (110 CV) que suman una potencia conjunta de 225 CV, 'caballería' que se dirige a las ruedas delanteras. El cambio es automático EAT8 con convertidor de par de 8 relaciones, y porta una batería de iones de litio de 11,8 kWh de capacidad que le permite homologar una autonomía exclusivamente eléctrica de hasta 53 kilómetros en ciclo WLTP (52 en la variante SW).
En una toma Wallbox de 6,6 kW se puede recargar en apenas 1 hora y 45 minutos. El cargador de a bordo de este modelo es de 3,7 kW, aunque en opción se puede colocar otro de 7,4. La habitabilidad y la capacidad del maletero (487 litros) no sufren mermas con respecto al resto de la gama térmica.
Cuatro perfiles de conducción
En nuestra toma de contacto afrontamos un recorrido de 109 kilómetros con tramos en ciudad, carretera y autovía. La batería marca una autonomía de 40 kilómetros (no estaba cargada a tope) al inicio de la prueba y comenzamos el trazado. El 508 híbrido enchufable ofrece cuatro perfiles de conducción: Sport, Comfort, Híbrido y Eléctrico. Apostamos por los dos últimos en el recorrido, el Eléctrico para la ciudad y M-30, y el Híbrido para carretera y autopista.
Voy solo en el vehículo, con la climatización funcionando, en día lluvioso y cumpliendo con los límites de velocidad en cada tramo. Arranca siempre en eléctrico. Salgo de Madrid tras 17 kilómetros y en el ordenador de consumo marca 0,4 litros de media. Si fuéramos cuidadosos, y con la batería cargada a tope, podríamos completar en torno a 40 kilómetros reales de manera eléctrica, sin consumo de gasolina. Es un kilometraje mayor al que realiza la media de conductores a diario.
Consumo real de 3,6 litros
Seguimos por autopista, la velocidad media se incrementa hasta los 82 km/h y el consumo sube hasta los 2,8 litros. Llega un tramo de carretera, con curvas y perfil rompepiernas. En el cuadro sube hasta 3,9 litros y la velocidad media baja hasta los 73 km/h. Terminamos el recorrido, con la batería totalmente descargada, pero con cifras muy llamativas: 3,6 litros y a una velocidad media de 83 km/h.
Hemos realizado una conducción eficiente pero real, lejos de lo que sería un miniconsumo. Y recordad que hablamos de 225 CV. El consumo homologado por la marca es de 1,3 litros cada 100 kilómetros (WLTP) y 29 g/km de CO2. Y está a la venta desde 46.850 euros, 36.750 si se aplican todos los descuentos y ayudas disponibles.
Habrá quien se pregunte por qué el 508 PHEV no contempla la variante de 300 CV con tracción total que sí comercializa el 3008 PHEV. Quizás algo tenga que ver el nuevo 508 PSE (Peugeot Sport Engineered). Básicamente se trata de combinar la eficiencia con un vehículo deportivo y prestacional.
Hasta 360 CV de potencia
Preparado por Peugeot Sport, llegará al mercado a comienzos del año que viene. Se trata del modelo más potente de la gama, con 360 CV y 520 Nm de par máximo. En este caso el motor de gasolina ofrece 200 CV, el eléctrico delantero 81 kW (110 CV) y añade un segundo propulsor eléctrico en el eje trasero de 83 kW (113 CV) que dota al conjunto de tracción total. No hay cambios en la batería ni en la transmisión automática EAT8.
Este modelo puede circular hasta los 140 km/h en modo exclusivamente eléctrico y tiene limitada la velocidad máxima a 250 km/h. Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,2 segundos. Además de un chasis rebajado en su altura ofrece un perfil de conducción extra, como es el modo 4WD. Lógicamente esta versión se viste con un traje más deportivo, con llantas de 20 pulgadas y detalles en verde criptonita tanto en el exterior como en el interior. La cartografía del cuadro de mandos digital y de la pantalla táctil también es diferente. Será la guinda a una gama electrificada en Peugeot que no deja de crecer.
