El regreso a la rutina tras las vacaciones no solo supone un reto para nosotros, sino también para nuestros coches. Después de recorrer kilómetros bajo el sol abrasador y enfrentarse a carreteras variadas, el coche necesita un cuidado especial para continuar funcionando a la perfección. Sin embargo, no es necesario acudir siempre a grandes cadenas como Norauto, Midas o Aurgi para poner tu coche a punto; tú mismo puedes realizar varias tareas de mantenimiento que asegurarán su rendimiento óptimo para afrontar la vuelta a la rutina.
Las vacaciones pueden haber sido relajantes para ti, pero tu coche ha pasado por diversas pruebas: desde largas distancias, altas temperaturas, hasta constantes exposiciones al sol y caminos irregulares. Todo esto puede generar un desgaste notable en los componentes del vehículo. Ignorar estos factores puede llevar a averías inesperadas justo cuando más necesitas tu coche en el día a día.
El mantenimiento preventivo no solo alarga la vida útil del coche, sino que también previene sorpresas desagradables que, a largo plazo, podrían afectar tu bolsillo y tu seguridad en la carretera.
3Revisión de neumáticos: Garantía de seguridad
Los neumáticos son un componente crítico para su seguridad. Después de los rigores del verano, es el momento perfecto para comprobar su estado. Verifica la presión de los neumáticos y ajusta según las especificaciones del fabricante. También es importante revisar la profundidad del dibujo, que debe ser superior a 1,6 mm, ya que un desgaste excesivo afecta la tracción y la capacidad de evacuar agua en superficies mojadas. Si detectas algún signo de desgaste irregular o pinchazos, no dudes en cambiar los neumáticos.