Los controles de alcoholemia son una herramienta vital para garantizar la seguridad vial; pero a veces pueden dar resultados que no esperamos. Imagina que te detienen para una prueba de alcohol y, aunque no has bebido nada, el alcoholímetro indica lo contrario. ¿Cómo es posible? Pues bien, ese falso positivo lo podría estar causando un producto que probablemente uses todos los días. Y no, no es lo que piensas: hablamos de algo tan común como un colutorio de higiene bucal.
4Cómo evitar dar un falso positivo
Ante esta situación, lo más importante es no entrar en pánico. Si acabas de usar colutorio y te encuentras frente a un control de alcoholemia, hay varias formas de manejar el falso positivo. La primera recomendación es siempre solicitar una segunda prueba de contraste. En muchos casos, los agentes cuentan con alcoholímetros más precisos instalados en furgonetas que pueden ofrecer una lectura más fiable.
Si el resultado de alcoholemia sigue siendo positivo tras la segunda prueba, es crucial pedir un análisis de sangre. A diferencia del aire espirado, el análisis de sangre es mucho más preciso y mostrará si realmente hay alcohol en tu organismo. En la mayoría de los casos, si solo usaste un colutorio, el análisis de sangre no revelará la presencia de alcohol, lo que puede ayudarte a evitar una sanción injusta.