La borrasca Celia ha traído consigo escenas insólitas en toda España, cubriendo amplias zonas del país con un manto de arena procedente del Sáhara. Esta densa calima arrastra grandes cantidades de partículas en suspensión, y su impacto se hace especialmente evidente en los coches aparcados en la calle. Más allá de la escena inusual, la acumulación de polvo y barro puede causar serios problemas en los vehículos. En este artículo, te explicamos cómo proteger tu coche de la lluvia de barro y los efectos perniciosos de la calima.
4La carrocería
Aunque limpiar la carrocería puede no parecer tan urgente, es esencial para evitar su deterioro. No dejes que se forme barro y, si ya ha aparecido, no permitas que se seque. Para evitar arañazos en la carrocería, primero lubrica la superficie con agua, cera en spray o jabón, especialmente si vas a llevar el coche a un túnel de lavado automático.
Lubricar la superficie ablanda los restos de barro y facilita su eliminación sin dañar la pintura. Utiliza agua tibia para la limpieza, ya que ayuda a retirar el barro más fácilmente. No olvides limpiar las partes bajas del vehículo y el tubo de escape, ya que la acumulación de suciedad puede provocar oxidación.