La borrasca Celia ha traído consigo escenas insólitas en toda España, cubriendo amplias zonas del país con un manto de arena procedente del Sáhara. Esta densa calima arrastra grandes cantidades de partículas en suspensión, y su impacto se hace especialmente evidente en los coches aparcados en la calle. Más allá de la escena inusual, la acumulación de polvo y barro puede causar serios problemas en los vehículos. En este artículo, te explicamos cómo proteger tu coche de la lluvia de barro y los efectos perniciosos de la calima.
5El interior
Si el polvo ha llegado al interior del habitáculo, es mejor dejar que el barro se seque antes de intentar retirarlo. El fango húmedo se extiende fácilmente por la tapicería, dificultando su limpieza. Una vez seco, raspa cuidadosamente las superficies con una espátula y retira los restos con una aspiradora.
Este método permite eliminar el barro sin dañar la tapicería ni esparcir la suciedad. Para una limpieza más profunda, considera usar productos específicos para la limpieza de interiores de coches, que ayudan a mantener el habitáculo en perfectas condiciones.
