Las temperaturas muy altas o muy bajas son muy perjudiciales para el parabrisas del coche, especialmente si tenemos un picotazo o chinazo. Las diferencias de temperatura hace que se contraiga o se expanda, lo que puede hacer que aparezcan rajas donde antes había un chinazo o similar. Es por eso que debemos prestar mucha atención al estado del parabrisas, un parabrisas roto es peligroso y puede suponernos una multa.
4Cuidados y precauciones
El problema es que cuando hay un picotazo, si no lo arreglamos va a tender a hacerse una rajita. Y la rajita tenderá a hacerse una raja en condiciones de lado a lado del parabrisas. Sin duda que el mejor consejo que podemos dar es que debemos llevarlo a arreglar cuanto antes si no queremos tener mayores problemas.
Es por ello que si detectamos un chinazo debemos tener cuidado en determinadas circunstancias.
- Los cambios de temperatura bruscos pueden afectar y hacer más grandes las roturas. Principalmente las diferencias de temperatura. Por ejemplo, conviene que tengamos cuidado si tenemos el coche al sol a mucha temperatura y decidimos meterlo en un lavadero. También puede que le entre algo de agua y con el calor y el frío puede empeorar la situación.
- También es importante que tengamos cuidado con los badenes y los resaltos. Pues cualquier torsión excesiva puede provocar el mismo efecto, que se agrande la grieta y entonces no haya posible reparación.
- Ojo con los bordillos y las aceras, en los bordillos se produce también una torsión de la carrocería que afecta mucho al parabrisas, del mismo modo puede provocar que se rompa.
La diferencia principal entre un chinazo y una raja es que el parabrisas tiene arreglo mientras la rotura es un chinazo, pero si pasa a ser una raja no tiene reparación posible.
De hecho, como norma general para saber si un picotazo o rotura tiene arreglo es tan sencillo como que si mide menos de diámetro que una moneda de dos euros se puede reparar. Siempre eso sí que esté a menos de 2,5 centímetros del marco del parabrisas.
Las reparaciones de chinazos en el parabrisas son bastante económicas, pues cuesta en torno a los 50 euros, sin duda mucho más barato que sustituir la luna completa. Todo ello una operación que no supone más de media hora de reparación en el mejor de los casos, y que puede ahorrarnos cientos de euros.