Imagina un radar que no solo detecta la velocidad de los vehículos, sino que además es capaz de identificar si un conductor está usando el móvil, si ha consumido drogas o alcohol, o si alguien en el coche no lleva puesto el cinturón de seguridad. Parece sacado de una película futurista, pero este dispositivo ya es una realidad que se está probando en las carreteras de Devon y Cornwall, en el Reino Unido.
Diseñado por la empresa australiana Acusensus, este radar equipado con inteligencia artificial apunta a revolucionar la seguridad vial en Europa, y las autoridades españolas, como la Dirección General de Tráfico (DGT), ya sueñan con incorporar algo similar a su arsenal de herramientas.
3Tecnología al servicio de la policía
La colaboración entre tecnología y fuerzas del orden es fundamental para que este tipo de dispositivos funcionen. En el caso del Reino Unido, la policía de Devon y Cornwall supervisa la operación del radar en una red de carreteras que abarca más de 22.000 kilómetros. Simon Jenkinson, comisario de la policía local, destaca la importancia de herramientas tecnológicas como esta: “Nuestros agentes no pueden estar en todas partes, pero la tecnología puede ayudarnos a reducir significativamente el número de personas muertas o gravemente heridas en nuestras carreteras”.
Durante los primeros días de prueba, los resultados han sido prometedores. El radar ha identificado a conductores que utilizan su teléfono móvil y pasajeros sin cinturón de seguridad, infracciones que, aunque comunes, son altamente peligrosas. Una vez confirmada la posible infracción, la información recopilada, incluidas las fotografías del vehículo y su matrícula, se transmite a la policía para que realice los controles necesarios.
