La labor de vigilancia y control del tráfico por parte de la Dirección General de Tráfico (DGT) incluye diversas herramientas, entre las cuales destacan los radares móviles de la Guardia Civil de Tráfico. Estos vehículos camuflados son una de las estrategias utilizadas por las autoridades para detectar infracciones sin ser fácilmente identificados por los conductores. Pero, ¿cómo son por dentro estos radares móviles y qué dispositivos utilizan para llevar a cabo su función?
4Los procedimientos de operación
En cuanto a los procedimientos de operación, los agentes de la Guardia Civil que manejan estos vehículos camuflados suelen recibir formación específica para su uso adecuado. Esto incluye conocimientos sobre la ubicación estratégica de los radares móviles y cómo proceder en caso de detectar una infracción.
Además, se establecen protocolos claros para la emisión de las multas. Una vez que el radar detecta una infracción, el agente verifica la información y procede a tramitar la correspondiente sanción. Es importante destacar que este proceso se realiza de acuerdo con la normativa vigente y con los debidos controles de legalidad para garantizar la validez de las multas emitidas.
En resumen, los procedimientos de operación de los radares móviles dentro de los coches camuflados de la Guardia Civil son rigurosos y están diseñados para garantizar la efectividad y legalidad en la detección de infracciones de tráfico.