En una reciente jornada informativa, la Asociación Española de la Normalización (UNE) y el Centro Español de Metrología (CEM) revelaron el impulso de una nueva normativa que regulará la medición en remoto de las emisiones de los vehículos… y si de multas va la cosa, nos interesa.
Esta iniciativa, pionera a nivel nacional, responde a la necesidad de controlar las Zonas de Bajas Emisiones, cuya obligatoriedad se extenderá a todas las ciudades de más de 50,000 habitantes a partir de enero de 2025.
7Adaptación y concienciación: clave para el futuro
Ante la inminente llegada de los radares de emisiones y la nueva normativa que regulará su implementación, la adaptación de los conductores y la concienciación sobre la importancia de reducir las emisiones se vuelven cruciales. La transición hacia un parque automotor más sostenible no solo implica la incorporación de nuevas tecnologías y regulaciones, sino también un cambio en la mentalidad de los usuarios de la vía.
Multas al margen, la concienciación sobre la calidad del aire y sus efectos en la salud pública debe ser prioritaria. Comprender cómo las emisiones de los vehículos contribuyen a la contaminación atmosférica y, por ende, a los problemas respiratorios y ambientales, es fundamental. Los conductores pueden desempeñar un papel activo al elegir vehículos más eficientes y adoptar prácticas de conducción respetuosas con el medio ambiente.