El Range Rover Evoque es un modelo de éxito que ha roto las expectativas más optimistas a nivel de ventas. De heho en algunos mercados protagoniza más de la mitad de las ventas de la marca él solito. Está claro que tanto carisma hay que aprovecharlo y, después de tres años de desarrollo, ya está lista la variante Convertible, la más exclusiva de la gama.
El punto de partida ha sido el Salón de Los Ángeles, pero en Motor 16 tuvimos ocasión de asistir hace algunas semanas a una presentación estática de este modelo que combina, con total naturalidad, diseño, lujo, tecnología, exclusividad y… capacidad off road, ya que la marca obliga.
No tiene rivales actualmente
Los 'padres' de la criatura hablan del primer modelo de estas características en el mercado. Habrá quien diga que ese título honorífico debe recaer sobre el Nissan Murano Cross-Cabriolet, pero en la firma británica tienen la réplica preparada: es el primer SUV cabrio con sello Premium. No entraremos en esa guerra; vosotros tendréis vuestra propia opinión.
Dicho esto vamos a analizar las virtudes de este modelo. Toma como base la versión Coupé y hereda sus 4,37 metros de longitud. Eso sí, el aforo se limita a cuatro confortables plazas. El vínculo emocional y su personalidad recae sobre el techo eléctrico de lona que se repliega en 18 segundos y se monta en 21. Esta operación se puede realizar en marcha siempre que no se superen los 48 km/h.
En techo consta de cinco capas y goza de tal calidad que anuncian una sonoridad en el interior similar a la del techo duro tradicional. Montado o replegado, no influye en la capacidad del maletero, que ofrece 251 litros. Se accede por un portón que cambia, lógicamente, el diseño con respecto al de sus hermanos, y resulta realmente diáfano y limpio en sus formas. Los respaldos traseros no se abaten, pero cuenta con una 'tramplilla' para poder introducir objetos largos, como esquíes.
Sistema de protección antivuelco
El Evoque Convertible se ha sometido a un profundo trabajo a nivel de chasis, añadiendo estudiados refuerzos estructurales para mantener la rigidez torsional del conjunto al mismo nivel que el de sus hermanos. Además, se han reforzado los pilares A y cuenta con un sistema de protección antivuelco situado detrás de las plazas traseras que se activa automáticamente en 90 milísegundos cuando existe riesgo de vuelco. Asimismo, ha sido necesario desarrollar un nuevo sistema de airbags en los asientos delanteros que cubren la zona de la cabeza y el tórax de sus ocupantes.
El interior presenta cuatro plazas y mantiene el grado de calidad y lujo al que acostumbra Range Rover. Estrena el sistema de infoentretenimiento InControlTM Touch Pro, que ofrece conexión 3G y dispone de una generosa pantalla táctil de 10,2 pulgadas. De esta manera se puede sincronizar el smartphone al vehículo y conectar hasta ocho dispositivos móviles a un acceso a Internet, entre otras muchas funciones.
Hasta 240 caballos de potencia
Bajo el capó no hay cambios, ya que hereda la gama de motorizaciones de la familia Evoque, todos ellos de dos litros y cuatro cilindro construidos en aluminio. En gasolina rinde 240 caballos, mientras que en ciclo turbodiésel se puede elegir entre 150 y 180 CV. Para el cambio recurre a una caja manual de seis relaciones o a una transmisión automática de nueve velocidades.
Dinámicamente nos aseguran que, pese al incremento de peso y a dibujar una línea de cintura más elevada en la zaga, no habrá diferencias con respecto a la versión Coupé. Comparte soluciones como la dirección asistida eléctrica, un sistema de control de reparto de par en curvas y, por supuesto, la tracción total.
Excelente capacidad off road
Señalar que, pese a su exclusividad, la imagen robusta que presenta no deja dudas en cuanto a su capacidad off road. En este sentido incorpora el sistema Terrain Response, que adapta la electrónica en función de los cuatro programas que puede seleccionar el conductor: Normal, Hierba, Gravilla/Nieve/Barro/Surcos y Arena.
Además, contempla el sofisticado All-Terrain Progress Control, que permite seleccionar la velocidad del vehículo (entre 1,8 y 30 km/h) sin necesidad de pisar el acelerador, para que el conductor se centre en la conducción off road, liberándole de cargas. También incorpora un sensor que mide la profundidad de un vadeo (supera pasos de agua de hasta medio metro de profundidad) y un práctico sistema de control de descensos.
Avalancha tecnológica
Por último, destacar que el Evoque Convertible hace gala de una completa y avanzada dotación en materia de seguridad y confort, con elementos como una frenada de emergencia automática, que evita la colisión con el vehículo que nos precede o minimiza las consecuecias de una posible colisión. Ofrece, asimismo, un asistente de aparcamiento asistido, una alerta de cambio involuntario de carril, una más de fatiga del conductor, un lector de señales de tráfico, un Head-up Display que proyecta la información en el parabrisas…
En definitiva, la tercera variante del Evoque va un paso más allá en cuanto a exclusividad, tanto que no contempla rivales directos en estos momentos. Ahora sólo queda esperar a que llegue la primavera de 2016, momento en el que iniciará su comercialización por unos precios
2.0LTD4 Diesel 150CV 4×4 SE Dynamic
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54.700
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2.0LTD4 Diesel 150CV 4×4 HSE Dynamic
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61.200
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2.0LTD4 Diesel 180CV 4×4 SE Dynamic
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57.700
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2.0LTD4 Diesel 180CV 4×4 HSE Dynamic
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64.200
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2.0LSi4 Gasolina 240CV 4×4 SE Dynamic
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63.400
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2.0LSi4 Gasolina 240CV 4×4 HSE Dynamic
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70.500
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