Recibir una multa por no haber pasado la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) puede ser una experiencia frustrante para cualquier conductor. Sin embargo, no todas estas sanciones son definitivas. Existen diversas razones por las que una multa de este tipo puede ser anulada, siempre y cuando se presenten los argumentos y pruebas adecuadas.
En este artículo, te explicamos de forma clara y práctica cómo puedes recurrir una multa de ITV, los pasos que debes seguir y los errores que debes evitar para tener éxito en tu reclamación.
4Pasos para recurrir la sanción
Recurrir una multa por ITV caducada es un proceso que requiere atención a los detalles. Cualquier inexactitud en los datos puede ser motivo para recurrir la sanción. Si has identificado errores, lo crucial es reunir pruebas que respalden tu reclamación. Puedes incluir justificantes de citas de ITV, fotografías del vehículo estacionado (si se ha emitido por estar en circulación) y copias de notificaciones oficiales. Estas evidencias serán clave para demostrar que la sanción no está justificada.
Recopiladas las pruebas, es momento de presentar el recurso. Es importante tener en cuenta que el plazo es de 20 días hábiles desde la recepción de la sanción, por lo que deberás actuar con rapidez. Si el proceso te resulta complejo o no tienes experiencia en estas reclamaciones, considera pedir ayuda a un abogado especializado. Te asesorará sobre los argumentos más efectivos para maximizar tus posibilidades de éxito en la anulación de la multa.