La DGT utiliza el proceso de renovación del carnet de conducir para asegurarse de que todos los conductores, que circulan por las carreteras españolas, mantienen las cualiades necesarias para ponerse al frente de un volante. Para conseguir o renovar el carnet de conducir, se ha de pasar un reconocimiento médico acordado por la DGT, en un centro homologado por este organismo.
Los baremos para pasar superar con éxito esta revisión médica no cambiaban desde el año 2007, pero desde el año pasado, con la aprobación de la Nueva Ley de tráfico, la DGT endureció este examen y las pruebas a las que tienen que someterse los conductores son más exhaustivas.
3La edad no es un impedimento para dejar el volante, pero sí las condiciones de salud
El momento en el que una persona debe dejar de conducir no dependerá de su edad. La DGT no ha puesto un tope de edad máximo para la renovación de la licencia, pero sino se superan las pruebas anteriores no se podrá seguir conduciendo. De este modo la renovación del carnet no está sujeta a los años que se cumplen, sino al estado físico y mental de los conductores. La única diferencia que hace la DGT con la edad, es que los conductores mayores de 65 años deben renovar el carnet con más asiduidad, así se aseguran de que están en óptimas condiciones para ponerse al volante de un coche.
El nuevo protocolo posibilita la obtención de fórmulas para calcular índices, aunar criterios, poner límites a la conducción o usar códigos de restricción según el nivel y el tipo de discapacidad. Aparte se sumarán diversas adaptaciones que se pueden encontrar en un vehículo adaptado, como prótesis y elementos de ayuda para suplir las limitaciones del conductor.