La competencia entre gasolineras en España ha dado un giro significativo en los últimos años. Lo que antes era un mercado dominado por gigantes como Repsol, Cepsa y BP, ahora es un terreno fértil para nuevas cadenas que han sabido captar la atención de los consumidores. El cambio no se debe solo a la evolución natural del mercado, sino también a la aparición de redes de estaciones ‘low cost’ que están revolucionando el sector. En este artículo desvelamos cómo estas nuevas alternativas le están robando protagonismo a las grandes corporaciones y por qué cada vez más españoles llenan sus depósitos en estas gasolineras.
1Las cadenas de gasolineras ‘low cost’
Las gasolineras ‘low cost’ se han convertido en un fenómeno imparable en España. Según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), las estaciones de bajo coste han aumentado un 30% desde 2009. Gran parte de este crecimiento se debe a la expansión de redes independientes como Plenoil, Petroprix y Ballenoil, que han sabido aprovechar las ventajas de las gasolineras sin personal para ofrecer precios hasta un 10% más bajos que en las estaciones tradicionales.
Este modelo de negocio ha resultado ser tan exitoso que, en el primer semestre de 2024, Plenoil abrió 30 nuevas estaciones, Ballenoil inauguró 18 y Petroprix sumó 9 nuevas a su red; un crecimiento vertiginoso que es un claro reflejo de la demanda del consumidor por alternativas más económicas. En un contexto en que el ahorro es fundamental, estas cadenas han encontrado la fórmula para atraer a los conductores que buscan calidad a precios más accesibles.
