Los límites de velocidad en España están establecidos para garantizar la seguridad vial y reducir el riesgo de accidentes. En autovías y autopistas, la máxima permitida para los turismos es de 120 km/h. Sin embargo, existe una excepción poco conocida que permite circular hasta los 150 km/h sin recibir una multa de la Guardia Civil.
Esta posibilidad está reservada a un tipo muy específico de vehículos que no pertenecen a los cuerpos de seguridad ni a los servicios de emergencia. Nos referimos a los vehículos de prueba, que cuentan con un permiso especial otorgado por la DGT. ¿No sabes qué es exactamente un vehículo de prueba? Pues en este artículo, te lo explicamos.
1¿Qué es un vehículo de prueba o F.V.?

Los vehículos de prueba, o también conocidos como F.V. (fabricante de vehículos), son aquellos utilizados por las marcas de automóviles para llevar a cabo procesos de investigación y desarrollo. Se emplean en ensayos en vías públicas y cuentan con una autorización especial que les permite circular a velocidades superiores a las habituales.
Estos vehículos especiales se utilizan principalmente para probar nuevos modelos, realizar tests de seguridad o evaluar mejoras tecnológicas antes de lanzarlos al mercado. La posibilidad de circular a velocidades más altas de las establecidas por la normativa les permite simular escenarios reales con los que los clientes se podrían encontrar en la carretera.