Nos ha pasado a todos: el indicador de combustible comienza a parpadear y la reserva se enciende en el tablero. Puede ser tentador ignorar este aviso y esperar hasta la próxima estación de servicio o dejar el repostaje para otro día. Pero, ¿sabías que esta costumbre aparentemente inofensiva puede dañar gravemente el motor y otras partes de tu coche? Te explico por qué mantener el depósito bajo mínimos y llenarlo hasta el tope de una sola vez es una práctica que deberías reconsiderar.
5¿Por qué los conductores se arriesgan a repostar en reserva?
Aunque algunos creen que repostar en reserva ayuda a «limpiar» el depósito al consumir lo que queda en el fondo, esta creencia es un mito. El sistema de combustible está diseñado para funcionar de forma óptima con un nivel de carburante moderado a alto, ya que esto ayuda a reducir la fricción y facilitar la circulación del combustible. De hecho, el propio fabricante de tu coche incluye en el manual recomendaciones para evitar circular con el depósito de vacío, pues eso exige un esfuerzo mayor al sistema de inyección ya la bomba de combustible, acortando su vida útil.
Repostar puede parecer una actividad trivial, pero la forma en que lo hagas puede tener efectos importantes en la vida útil del coche y en tu economía a largo plazo. Conducir con el tanque vacío exponen al motor a impurezas y reducir la eficiencia del combustible debido a la formación de espuma y evaporación. Por eso, si deseas que tu coche funcione sin problemas y ahorrarte futuras reparaciones, considera dejar atrás el hábito de “apurar” el depósito. Recuerda que el ahorro verdadero no está en llenar el tanque a última hora, sino en hacerlo de forma consciente y cuidando de tu vehículo.