El clima español es especialmente complicado para la mecánica de los coches. Más que por las temperaturas extremas, por la horquilla de temperaturas tan cambiante que manejamos. Aquí en verano es habitual superar los 40 grados centígrados, mientras que en invierno podemos rondar los menos 10 grados centígrados; 50 grados de diferencia.
Estas variaciones suponen un verdadero suplicio para el coche por lo que conviene realizar un mantenimiento.
2Líquidos del coche
Nivel de aceite
Las altas temperaturas del verano puede provocar la degradación o la evaporación de determinados líquidos y fluidos del coche. Hablamos de lubricante, anticongelante, limpiaparabrisas y líquido de frenos. Con la comprobación y rellenado de estos niveles será suficiente.