En el año 2018 la firma croata Rimac Automobili comenzaba a hablar de su impresionante C_Two, un bólido eléctrico que desde entonces han estado evolucionando hasta dar con este sobrenatural Rimac Nevera, una criatura cuyo nombre, a diferencia de lo que significa para nosotros, en croata hace alusión a una poderosa tormenta mediterránea. Y así es como llega este deportivo que promete sensaciones fuertes.
Si lo comparamos con el prototipo conocidos hasta la fecha, el Nevera definitivo presenta una gran cantidad de cambios en su carrocería de fibra de carbono, todos ellos enfocados a mejorar considerablemente la aerodinámica de este deportivo. Tanto que mejora un 34% respecto al modelo original. Para conseguirlo Rimac ha modificado aspectos como el perfil del capó, la forma de sus pilares delanteros, además del diseño de los difusores para optimizar el flujo del aire que recorre el vehículo.
Tiene aerodinámica activa
Estas tomas de refrigeración se han rediseñado para aumentar la eficiencia de enfriamiento de su equipo de frenos en un 30%, además de una mejora del 7% para su mecánica.
Pero lo más sorprendente de este sensacional Rimac Nevera son sus apéndices aerodinámicos activos, que permiten variar la carga dependiendo de la velocidad del vehículo. Cuando se circula en modo 'baja resistencia', este deportivo reduce su resistencia aerodinámica en un 17,5%, para ofrecer un coeficiente aerodinámico de solo 0,30. Si por el contrario se selecciona el programa 'alta carga aerodinámica', su carrocería aumentará sus niveles de carga para incrementarla en un 326%.
Debajo de esa carrocería se esconde una mecánica conocida, porque esta configuración de cuatro motores ya se utilizaba en el Rimac Concept One, solo que ahora bajo este Nevera llegan a generar la friolera de 1.914 CV de potencia y 2.360 Nm de par motor. Para alimentarlos Rimac recurre a una batería que combina el litio y el manganeso que tiene una capacidad de 120 kWh, de forma que Rimac asegura que le proporciona una autonomía en ciclo WLTP de hasta 547 kilómetros.
De 0 a 300 km/h en 9,3 segundos
La firma croata asegura que este impresionante Rimac Nevera puede acelerar de 0 a 100 km/h en solo 1,85 segundos, mientras que apenas en 9,3 segundos puede alcanzar los 300 km/h desde parado. Y eso son dos décimas menos de lo que requiere un Audi A4 30 TDI para acelerar de 0 a 100 km/h. Y por si fuera poco, dicen que no para hasta llegar a los 412 km/h.
Todo ello se construye sobre la base de un nuevo chasis monocasco de fibra de carbono, que ha sido especialmente diseñado para albergar su paquete de baterías, que también forman parte de la estructura del propio Nevera. Tanto es así que estas incrementan un 37% su rigidez estructural, además de que ayudan a bajar el centro de gravedad y optimizar el reparto de pesos entre sus ejes, que se sitúa en un 48/52 por ciento.
Rimac buscaba fabricar un deportivo tan rápido y eficiente, como confortable y lujoso, de forma que ha desarrollado diferentes programas de conducción que se adaptan a las necesidades del conductor en cada momento. De forma que ofrece un total de siete modos entre los que se incluyen los Sport, Drift, Comfort, Range, Track y dos modos que se pueden personalizar al gusto del consumidor.
Solo 150 unidades por 2.000.000 la pieza
Por si todo esto no fuera suficiente, también contempla un avanzado sistema de inteligencia artificial, de forma que viene equipado con el primer entrenador de conducción del mundo. Este sistema analiza y evalúa el rendimiento cuando se conduce en circuito, proporcionando al conductor consejos para mejorar sus tiempos por vuelta. El conocido como Rimac Driving Coach utiliza nada menos que 12 sensores ultrasónicos, 13 cámaras, 6 radares y un avanzado sistema operativo desarrollado por NVIDIA para superponer nuestro Nevera sobre prácticamente cualquier pista de carreras del mundo en tiempo real. Así plasmará sobre la luna delantera las líneas de trazado, los puntos de frenada y de aceleración…
En ese exclusivo interior también aparecen tres pantallas de alta definición que conforman su cuadro de instrumentos, sistema de infoentretenimiento y pantalla de información para el acompañante. En aluminio se fabrican sus mandos y controles que confieren una sensación analógica, cuando prácticamente todo es digital en este Rimac Nevera, que además contempla espacio para dos ocupantes y su equipaje.
Rimac ofrecerá a sus clientes la posibilidad de poder configurar al gusto cada uno de estos Nevera, de forma que es posible que no haya dos vehículos iguales, sin pasar por algo que la firma croata lanzará ediciones especiales creadas a la medida y denominados GT, Signature y Timeless.
Pero hay que tener en cuenta que Rimac tan solo fabricará un máximo de 150 unidades de este bólido eléctrico, que costará como mínimo dos millones de euros… sin impuestos.