Los semáforos con radar son una de las peores pesadillas de los conductores cuando tienen que circular por ciudad. Un pequeño descuido a la hora de pasar por el semáforo puede salir muy caro.
En los últimos años, los ayuntamientos han ido reforzando sus sistemas de control en sus calles. Para la gestión del tráfico han incluido varias cámaras en numerosos semáforos del centro de las ciudades, o en puntos conflictivos que registran una mayor cifra de accidentes.
7¿Cómo funciona las multas de los fotorojos?
Cuando un conductor se salta el semáforo en rojo, la cámara que lo controla tiene que realizar dos fotografías: una imagen de antes de que el vehículo se pare en la línea de detención, y una de después de cuando el vehículo ya ha cruzado dicha línea.
Comprobando el color del semáforo en ambas fotografías se puede saber si el conductor se ha saltado el semáforo, o si estaba en ámbar cuando pasó por la raya. Hay otra cámara de infrarrojos, que es la encargada de registrar la matrícula.