Ir conduciendo tranquilamente y de repente oír un ruido muy fuerte e inusual puede ser muy perturbador. Sobre todo si no sabes el origen. Haber pinchado una rueda suele ser lo primero que se nos viene a la mente. Los pinchazos se producen de manera repentina y en la mayoría de los casos el conductor no llega a saber qué lo provocó.
Cuando sales a la carretera te arriesgas a que esto ocurra. Nadie está libre de sufrirlo. Un neumático pinchado es uno de los motivos más habituales por los que los conductores recurren a la asistencia en carretera. Por eso es muy importante saber cómo actuar y no dejarse llevar por el pánico.
1¿Cómo saber si he pinchado una rueda?
Si tienes un vehículo moderno, el propio coche te avisará de que hay un fallo en la presión de los neumáticos. Si tu coche es de los antiguos, hay dos elementos que te indican que estás ante una rueda pinchada. El más perceptible es el ruido. A medida que se desinfla el neumático, la banda de rodadura irá emitiendo un sonido totalmente diferente al habitual. Cuanto más tardes en detener la marcha, más fuerte sonará.
Si además del ruido, notas que la dirección se endurece y que el coche comienza a deslizarse ligeramente hacia un lado, puedes apostar a que se trata de un neumático pinchado. No te preocupes, mantén la calma y sigue estos consejos.