¿Te imaginas pagar religiosamente tu seguro y aun así estar circulando como si no lo tuvieras? En España, esta es la realidad para millones de conductores cuyo vehículo carece de una Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en vigor. A pesar de la obligatoriedad del seguro, su eficacia puede quedar anulada si el coche no pasa este control esencial. La ITV no es un simple trámite burocrático, sino un requisito que garantiza nuestra seguridad y la de quienes comparten la carretera.
2¿Qué ocurre con el seguro si no tienes ITV?
La ITV es mucho más que un sello en el parabrisas; su ausencia puede convertir su seguro en papel mojado. En caso de un accidente, la aseguradora está obligada a cubrir los daños a terceros por ley, pero podría reclamar posteriormente esos costos. Esto se conoce como el derecho de repetición y puede convertirse en una pesadilla económica.
Por otro lado, si el accidente solo involucra daños a tu coche y tienes un seguro a todo riesgo, la aseguradora podría negarse a cubrir los gastos, alegando negligencia por parte del conductor. En resumen, aunque tengas la póliza al día, la falta de ITV puede colocarte en una posición de vulnerabilidad tanto legal como financiera.