¿Te imaginas pagar religiosamente tu seguro y aun así estar circulando como si no lo tuvieras? En España, esta es la realidad para millones de conductores cuyo vehículo carece de una Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en vigor. A pesar de la obligatoriedad del seguro, su eficacia puede quedar anulada si el coche no pasa este control esencial. La ITV no es un simple trámite burocrático, sino un requisito que garantiza nuestra seguridad y la de quienes comparten la carretera.
4¿Qué se está haciendo al respecto?
La patronal AECA-ITV y UNESPA han propuesto acciones conjuntas para frenar el absentismo, como impedir la renovación del seguro si el vehículo no tiene medidas la ITV vigente. Aunque esta solución puede parecer drástica, podría forzar a los conductores a regularizar su situación, fortaleciendo la seguridad vial. Por otro lado, las autoridades están implementando tecnologías como cámaras inteligentes para detectar automáticamente vehículos sin ITV, lo que incrementa las sanciones y reduce la impunidad.
Evitar problemas es más sencillo de lo que parece. Mantén tu ITV al día, incluso si el vehículo parece estar en buen estado. Recuerda que un fallo inesperado podría ser la diferencia entre un trayecto seguro y un accidente grave. Consulta las fechas de renovación y, si encuentras reparaciones necesarias, considera el costo como una inversión en tu vida y la de otros.
El seguro obligatorio y la ITV no son enemigos, sino aliados en la protección de todos. Ignorarlos es jugar a la ruleta rusa en la carretera. Así que, antes de salir a conducir, pregúntate: ¿está tu coche realmente preparado para protegerte a ti ya quienes te rodean?
