Contratar un seguro para un coche eléctrico o híbrido es más caro que hacerlo para uno de combustión tradicional con prestaciones y precio similar. Un sobrecoste que llega a ser un 15% mayor en el caso del híbrido no enchufable y un 17% más en un eléctrico.
Es la conclusión a la que ha llegado la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) después de analizar 23 pólizas de seguro de coche a todo riesgo, detectando lo que consideran «enormes» diferencias de precio en las primas de un mismo automóvil, que para el caso del coche eléctrico varían entre 400 y 1.700 euros al año dependiendo de la aseguradora elegida. Solo 5 de las compañías analizadas ofrecen un coste similar o incluso inferior para un coche híbrido no enchufable o eléctrico.
Por compañías, entre las que mejor calidad-precio en el seguro del coche eléctrico ofrecen se encuentran Zurich Klinc para una póliza a todo riesgo sin franquicia y un conductor sin siniestralidad previa y con carné desde hace más de 10 años.
Esta empresa es una de las pocas que no penalizan a los coches híbridos y eléctricos y sus primas ascienden a 404 euros/año para un Seat León XS (coche con motor de gasolina), 397 euros/año para un Hyundai Ioniq (híbrido no enchufable) y 417 euros/año para un Citroën ë C4 (eléctrico).
La organización también destaca entre los seguros a todo riesgo con una franquicia de alrededor de 300 euros por su buena relación calidad precio la póliza de Liberty. En este caso las primas suman 192 euros para un Seat León XS, 269 euros/año para un Hyundai Ioniq y 231 euros/año para un Citroën ë C4.
La batería, clave en el sobrecoste del seguro del coche eléctrico
Según la OCU, el sobrecoste para el seguro del coche eléctrico puede explicarse por el elevado precio que supone la reparación de las baterías en caso de siniestro, que para un automóvil de gran autonomía podría alcanzar los 30.000 euros. A menudo, es necesario sustituirlas completamente por otras nuevas, explica la organización de consumidores.
Sin embargo, el sobreprecio a pagar en el seguro «no se justifica» en el caso de un coche híbrido no enchufable, puesto que su batería es más pequeña y, por lo tanto, bastante más barata (alrededor de 1.000 euros). En este sentido, la OCU apunta que la aseguradora podría estar considerando en ese precio otros factores como la frecuencia estimada de siniestro o el mayor o menor riesgo de causar daños a terceros.
Según los responsables del informe, en un accidente con un coche eléctrico «la aseguradora podría preferir una declaración de siniestro que evite la sustitución de las baterías», por lo que la OCU exige que se informe siempre del valor máximo indemnizable en las pólizas a todo riesgo, de modo que el asegurado pueda valorar el coste de la prima que va a pagar.
